Tabarca, la isla habitada más pequeña de España, consigue el certificado Starlight
Esta isla de Alicante ha conseguido el certificado 'Paraje Starlight' por sus buenas condiciones para la observación astronómica.
20 January 2022
La isla de Tabarca se ha alzado como primer enclave de la provincia de Alicante en obtener el certificado 'Paraje Starlight', una certificación que acredita la calidad del cielo para la observación astronómica de cara a desarrollar el astroturismo en la isla.
La vicealcaldesa y responsable del Patronato de Turismo Alicante City&Beach, Mari Carmen Sánchez, recibió este jueves en FITUR el certificado de mano de Antonia Varela, directora de la Fundación Starlight.
Astroturismo en Tabarca
Tabarca es la isla habitada más pequeña de España y fue la primera reserva marina de interés pesquero que se declaró como tal en el país. El Patronato de Turismo Alicante City&Beach ha tenido en cuenta su importancia como enclave natural para proponer a la Fundación Starlight su estudio como posible “Paraje Starlight” que finalmente ha obtenido.
"La riqueza natural de Tabarca hace que la isla sea el lugar idóneo para ser declarado Paraje Starlight. Esta certificación lleva aparejada no sólo la calidad del cielo para la observación sino también el compromiso de preservarlo de manera sostenible", ha explicado Sánchez.
La idea es desarrollar y comercializar en un futuro próximo paquetes turísticos para disfrutar de la observación con transporte y alojamiento en la isla. Además se plantearán acciones educativas y culturales vinculadas a la astronomía.
El lugar elegido para la observación es la conocida como “Punta Falcón” en el extremo más oriental de la isla. Desde este punto es posible disfrutar de las constelaciones durante todas las estaciones año. Así, por ejemplo, se pueden ver Orión, Tauro, Auriga y Géminis en invierno, Lyra, Cisne, Águila, Escorpio y Sagitario en verano, y todas las noches del año se puede disfrutar de las constelaciones circumpolares.
El astroturismo que promueve la Fundación Starlight es una modalidad de turismo sostenible y responsable que combina la observación del cielo nocturno, la divulgación y actividades de ocio relacionadas con la astronomíat. En el caso de sus parajes y reservas éstas deben disponer de medios para garantizar su protección, y además ser lugares visitables, con las adecuadas infraestructuras y actividades relacionadas con la oferta turística.
